La catedral de Notre-Dame



E ste monumento impresiona siempre con sus dimensiones, su elevación y su majestad. Hay que representarse allí, en un decorado más fastuoso que hoy, al joven Juan-Bautista sensible a las liturgias solemnes. A la edad de once años, declara que quiere hacerse sacerdote.

A dieciseis años, su intención se confirma, y en 1667, el arzobispo le nombra canónigo. Se ve atribuir, en el coro, la silla 21, el sitio de un primo de edad que había querido dejarle su lugar, debido a la piedad y el ardor a los estudios del joven Juan-Bautista.


L os cánonigos que una vez rodearon al obispo para ayudarlo a administrar la diócesis de Reims vivían en un recinto canónico abierto a los transeúntes durante el día.
E ste recinto incluía el claustro, los edificios necesarios para la vida común, las escuelas y todas las dependencias útiles para la administración de sus dominios y el ejercicio de su jurisdicción señorial en una parte de la ciudad (graneros, bodegas, tribunales y prisión). También había tiendas, especialmente mercerías y librerías impresoras.

E ra una verdadera ciudad dentro de la ciudad! Los edificios de este recinto casi han desaparecido hoy.
L a puerta del Capítulo, construida en 1531, es un vestigio de este "recinto".


U n año después de su ordenación, después de un encuentro con Adrien Nyel, Juan-Bautista de La Salle va a descubrir poco a poco la falta de educación de los niños pobres y la falta de formación docente. Llegado a los treinta y dos años de edad, Juan-Bautista ahora tiene la intención de dedicarse totalmente a la fundación de una comunidad de maestros de escuela.

P ara unirse a los maestros en su pobreza, abandona su canonicato y da su fortuna a los pobres durante una hambruna en 1683.